Literatura erótica.
Dos amantes dichosos hacen un solo pan,
una sola gota de luna en la hierba,
dejan andando dos sombras que se reúnen,
dejan un solo sol vacío en una cama.
De todas las verdades escogieron el día:
no se ataron con hilos sino con un aroma,
y no despedazaron la paz ni las palabras.
La dicha es una torre transparente.
El aire, el vino van con los dos amantes,
la noche les regala sus pétalos dichosos,
tienen derecho a todos los claveles.
Dos amantes dichosos no tienen fin ni muerte,
nacen y mueren muchas veces mientras viven,
tienen la eternidad de la naturaleza.
7 comentarios:
Maru, muy bonito, dos que quieren ser uno.Feliz finde
HOlaaaaaaaa, hay alguien por esta casa.jajajajaja
Si tienes esos pensamientos, acabas el sabado....
Mira que lo intentamos pero tu nada de nada
Ostia...la Maru escribiendo estas cosas??? Tia que te has enamorado y la has cagado ¡¡¡
Nefertiti, aquí estamos. Algo saturadas...
Karlos, el sábado? contigo? no recuerdo que intentara nada. Va a ser que, estoy peor de lo que pensaba. jajaja
Carburo, para tu información no estoy enamorada. Mi médico me lo ha prohibido. Y el texto no es mío, cómo es obvio.
Lo intentamos con La gata Lola pero, si estas mucho peor. Y que te dure
karlos, ja-ja-ja, qué graciosillo el niño!
Pobre chaval, con la cara de buena persona que tiene y las risas que nos echamos a su costa!
ººººººSaldrá mañana? Le veré este finde? Me guiñará un ojo? jajaja
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