nino nino ni...Con ustedes: EL TIEMPO

La tormenta perfecta. Qué mejor forma puede haber de anunciar un temporal, para no alertar a la población, que hacerlo con el título de una película. A mí me pone más el nombre científico de “ciclogénesis explosiva”. Me suena más erótica. No me preguntéis el por qué.

Para el lunes pronostican un frío Titánico en las Cumbres Borrascosas aunque, entra un frente de bajas presiones, que hará que el martes, caiga una Lluvia de albóndigas y suba la temperatura. Si bien es cierto que en las zonas de mayor afluencia de Gorilas habrá bancos de Niebla.

Ahora voy a dejar de decir Tontadas. Ya si eso, en el caso de que sobrevivamos, nos contamos el lunes cómo ha ido.

Me voy a apuntalar paneles a las ventanas por el "por si acaso”!

Queja-rta estoy!

Todo el día quejándonos de todo. El que tiene trabajo porque tiene demasiado y el que no tiene trabajo porque está en el paro. El que no tiene jefe está estresado de tenerlo que hacer todo él mismo, y el que lo tiene, porque nunca está de acuerdo con las decisiones de su superior.

Los funcionarios se quejan de que no tienen trabajo en su puesto de trabajo. Los empresarios protestan y envidian a los anteriores, porque les dan de comer a través de sus impuestos. El proletariado se queja de comer patatas todos los días a unos precios desorbitados. Mi madre se queja porque está harta de estar harta. Mi compañera de trabajo de queja del mal tiempo… Y yo, me quejo de tanta Queja.

Definición: Expresión de disgusto, disconformidad o enfado.

Ahí es nada. Tres sustantivos negativos para definir un concepto ya nos dice mucho, no os parece?

En este país de Quejumbrosos os diré que, quejarse no soluciona nada. Cargar con tu queja al otro, sólo provoca un sentimiento negativo en otra persona más, a demás del que ya tienes tú.

Deberíamos hacernos esta pregunta: Puedo ayudarte en algo? Por que si ante una queja la respuesta a esa pregunta es “No”, no me lo cuentes. Sólo me trasladarás tu pensamiento negativo, y yo ya tengo mis propios pensamientos oscuros. Si, en cambio, la respuesta es afirmativa, no te quejes. Dime en qué puedo ayudarte y, sin más dilación, vamos a ponernos manos a la obra, para solucionar eso que tanto te incomoda.

Suerte que de vez en cuando, veo que hay gente que disfruta sin motivos. Que Tarike nos sirva de ejemplo a todos.

Ay! qué vida ésta.

Ahora y antes de que me caliente, os dejo que no quiero seguir pensando en esto.

Por fin...

...fin de semana!

Este me lo tomaré con más calma. Del fin de semana de Carnavales me recuperé el miércoles.
No quiero volver a encontrarme como el sujeto descrito en el monólogo de Leo:

Fenómenos Para Normales.

Quisiera atraer vuestra atención, hacia un suceso que me fascina. Lleva ocurriendo hace tanto tiempo que, todo el mundo ha interiorizado la existencia de tal fenómeno, como otros tantos que se suceden en los hogares modernos, sin necesidad de hablar de ello.

Ya hubo grandes guerras en el pasado, como las del "Pero-Pon-Eso", que intentaron atajar las múltiples disputas que genera el simple hecho, de tener que cambiar el rollo. El rollo de Papel higiénco, digo.

A qué se debe esa carencia de aptitudes, que todos parecemos tener a la hora de cambiarlo? Tan costoso es ir al aparador, coger uno nuevo y reponerlo?

Por qué todo el munco se ve tentado a dejar un mínimo trocito de papel colgando del cartón. A caso eso, servirá de disculpa para el siguiente usuario del excusado.

Y qué hay de aquellos que, no puediendo ser egoístas con su congénere, van a por otro rollo de papel pero, !ojo!...no lo ponen. Lo dejan sobre la cisterna, porque se ve, que el esfuerzo ya les ha dejado agotados, y esperan a que llegue otra persona, para que proceda a su colocación en el dispensador.

Lo gracioso es que, es tan molesto encontrarse el rollo acabado como tener que cambiarlo. Preguntar a cualquiera. Qué te jode más, que no haya papel o que lo termines tú y tengas que reponerlo.

Llamarme loca pero, ¿nadie ha hecho un estudio sociológico al respecto? Se investiga el comportamiento del buitre leonado, y nadie tiene una solución para esta manía humana!

He aquí otro de los grandes debates de la humanidad:

¿Debe el papel higiénico enrollarse de la forma (A) o (B)?

Hay dos formas de instalar el rollo de papel higiénico sobre el dispensador. Esto es a menudo causa de encarnecidos debates y puede llegar a ser una situación problemática en hogares en los que haya puntos de vista enfrentados al respecto, aunque ambas variaciones son generalmente una cuestion de preferencias personales.

Yo estoy en el grupo de los que defienden la forma (A) de enrollamiento, la más práctica y visualmente más atractiva, pero está claro que el mundo está dividido sobre este tema.
Y vosotros qué opináis.

Un color: el amarillo. Un sabor: salado. Un libro: este.

"Me llamo Renée. Tengo cincuenta y cuatro años. Desde hace veintisiete, soy la portera del número 7 de la calle Grenelle, un bonito palacete con patio y jardín interiores, dividido en ocho pisos de lujo, todos habitados y todos gigantescos. Soy viuda, bajita, fea, rechoncha, tengo callos en los pies y también, a juzgar por ciertas mañanas que a mí misma me incomodan, un aliento que tumba de espaldas. No tengo estudios, siempre he sido pobre, discreta e insignificante. Vivo sola con mi gato, un animal grueso y perezoso, cuya única característica notable es que le huelen las patas cuando está disgustado. Ni uno ni otro nos esforzamos apenas por integrarnos en el círculo de nuestros semejantes. Como rara vez soy amable, aunque siempre cortés, no se me quiere, si bien pese a todo se me tolera porque correspondo tan bien a lo que la creencia social ha aglutinado como paradigma de la portera de finca, que soy uno de los múltiples engranajes que hacen girar la gran ilusión universal según la cual la vida tiene un sentido que se puede descifrar fácilmente."

Así empieza la novela que lleva por título “La elegancia del Erizo” de Barbery Muriel, que me cautivó por lo curioso de sus personajes, hasta tal punto, que cuando la terminé de leer la empecé de nuevo.
Una portera de los bajos fondos con una cultura sublime, una niña que fantasea con su propio suicidio mientras escribe un diario, León el gato, y un edificio lleno de pijos adinerados, son los ingredientes que hacen de este relato una fantasía real, tan divertida y tierna, que engancha desde la primera página.

Sé que la habréis leido, pero si hay alguién ahí fuera que todavía no la conoce, os la recomiendo.

ALQUEZAR-ASQUE-ALQUEZAR. Vamos de excursión!

Domingo tonto, 9 de la mañana.
Un sol tímido se cuela en mi habitación, lo que me anima a levantarme con unas ganas tremendas de salir al monte.
Desayuno a conciencia, recojo el equipo, y a las diez y cuarto, estamos en marcha. Rumbo al Somontano. Tras pasar un rato charlando con la amable señorita de la oficina de información y turismo de Alquezar, nos aventuramos en la senda rumbo a Asque.

VILLACANTAL

La buena conversación, la sencillez del recorrido y la multitud de alicientes que presenta, con una continua sucesión de badinas y saltos de agua color verde esmeralda, lo convierten en uno de los senderos más populares de la Sierra. Es accesible para cualquier persona, aunque sus 8 kilómetros de longitud y 5 horas de trayecto requieren de una mínima condición física.Llevamos únicamente calzado y ropa adecuada, además del imprescindible bocata, las olivas, unos frutos secos, agua y vino. Porque siempre he dicho que, como en casa en ningún sitio, pero si puedes estar comiendo en un paraje maravilloso, en buena compañía y brindando con un poco de vino, tampoco hay que renunciar a ello, no os parece.

Tras la parada forzosa para comer, pasamos sobre el puente románico de Villacantal, disfrutamos del salto de agua de Alquezar y el molino, abandonado en la actualidad.

CUEVA PICAMARTILLO

Regresamos al pueblo por el tramo de las pasarelas aéreas sobre el Vero, -no aptas para bebés, yayos y "miedicas" a las alturas- donde nos adentramos en el cañon del río Vero, a través de las inmensas paredes de roca que lo forman.

Un paseo encantador para un día donde hasta el tiempo acompañó, con una temperatura casi primaveral contando que estamos en Enero.