13 agosto 2007

MAMÁ QUIERO SER TOPERA


Cuando estudiaba por el sur mi madre siempre me alentaba a que fuera al Hotel Colón (la versión glamourosa de nuestro Pedro I) y me quedara sentada en las escaleras con un cartel colgando que dijera "pido una oportunidá". Esta solicitud iba dirgida ni más ni menos que al Litri, mozo con el que mi madre me veía ya caminando hacia el altar. Yo más bien pensaba que el Litri en que me viera la única oportunidad que me iba a dar era la de que me acabara violando alguno de su cuadrilla.

Para desgracia de mi madre yo nunca fui al Colón y además apareció Carolina Herrera Junior que hizo que mi madre dejara de insistir con el tema. Aunque para mi madre sea la más fantástica del mundo mundial, de vez en cuando también es realista.

Según ella, no sólo me veía a mí de señora esposa de torero sino que además le hacía mucha ilusión que mi padre pudiera ir a barrera con su niña a ver a su yerno. Mi madre siempre ha sido un poco rara, pá que engañarnos.

Yo con el tiempo empecé a hacerme a la idea de que los toros, bueno, lo que conlleva ir a los toros en sol en Huesca, era la mar de divertido y así empecé a pensar que igual la idea de mi madre, si bien con alguna variante, era más que fantástica.

La posibilidad de un marido torero en todo esto es más bien opcional. A mi lo que me gusta es ir a la plaza con todo el aderezo: la peineta, la mantilla, los claveles,... hasta una falda con volantes.

Todavía no lo he hecho, igual que tampoco me he comprado el bono aunque lleve años diciendo que para el año que viene me lo hago, pero tengo en mi cabeza hasta el diseño de la falda.

Blanca, a media pierna, con bolos verdes y un especie de volante con madroños (también verdes, por supuesto) que cruza por delante dando una sensación de pareo.

Así me gustaría ir a los toros, en versión folclórica. En una de estas me hago la falda, me pongo la mantilla por montera, añado unos geranios para dar color, cambio la pañoleta por un mantoncillo verde y me voy al tendido 5.
Con dos zarcillos.


7 comentarios:

kaktus dijo...

Me apunto. ¿Qué son los zarcillos? Tienen un nombre la mar de sonoro.

Y, después de los toros, podemos hacernos chicas-orquesta-ballet.

Pa hacernos así una jornada completa.

Anónimo dijo...

... Bueno, yo sigo soñando en el momento en el que Ricky Martín, en pleno concierto se dirige a mi y me pide que nos casemos juntos.

" Hola, me llamo Mai, tengo treinta y tres años y tambien fantaseo de vez en cuando..."

(Hasta tengo la poca decencia de contarselo a todo el mundo, incluido mi novio...)

Mai

Serjuzu dijo...

Interesantes fantasías. Yo tambien fantaseo con mantillas. Yo siempre las he visto como un interesante objetivo en algún juego de puntería, o susceptibles de ser escaparate de publicidad o carteles reivindicativos tipo: "este conejo es una mierda", "mi cara no es así: anoche me dieron garrafón" o "quien fuera la taleguilla de Cayetano!!!"

Anónimo dijo...

Espléndidas estabais!!! jajajajaja

buffy dijo...

Jajaja, pues ya hubieras pegado tu mas con el Litri que la sosa esa... porque el chico es bastante bocharrin y no me lo veo yo de Cubatas con la Carolina.

burbu dijo...

kaktus, lo del ballet sería el final perfecto.
mai,no te pienses, si luego estos famosos son todos unos amargaos.
sejuzu, fantaseas con mantillas? guau!!
luis, me temo que nos confundes con la peña las toperas de la pza de toros. Me temo que no somos nosotras aunque cada día las admiramos más.
buffy, gracias, se nota que me quieres

Anónimo dijo...

Me ha venido la imagen al leer. Confundido estaba.

El Litri y la operación polvorón. Míticos esos toreros!