Me voy despacio que tengo prisa por llegar...

Una tierra legendaria donde la naturaleza salvaje proporciona una belleza incomparable. Recorrerla es adentrarse en la naturaleza y conocer el medio ambiente en estado puro.

Montes verdes, fuentes transparentes, profundas grutas, elevadas cumbres, interminables playas, caudalosos torrentes, hielo y nieve, cristalinos lagos, constituyen un Paraíso Natural que ofrecen al visitante lugares de impresionante belleza y un escenario único para la práctica de todo tipo de actividades de aventura, relajación y paseos inolvidables. La contrastada orografía entre el mar y la montaña constituye el principal recurso natural y deleita de paisajes maravillosos para aquellos apasionados por la fotografía. 

Un regalo, no sólo para la vista sino también para el paladar, ya que su gastronomía es muy rica. Tiene dos características que quedan reflejadas en las costumbres culinarias, por un lado posee costas lo que le proporciona abundantes elementos marinos (pescados, mariscos) y por otro lado posee una Cordillera  con profundos valles, en los que crece en semi-libertad la ganadería, dando lugar a carne y a leche de características autóctonas.

Un lujazo para pasar unos días de vacaciones. Dormir mucho y comer mejor. Qué más podemos pedir. 

A la vuelta os cuento.