18 noviembre 2010

No será por ganas…

Hace mucho tiempo que quería escribir acerca de este tema, y gracias al post de Hombre Revenido, he decidido que es el mejor momento de tirarme a la piscina. Además de que carezco de un amplio público y me da menos pudor hablar del temita.

No hablemos de amor, ni de lo cariñosa que es nuestra pareja, ni del romanticismo. Hablemos del momento en que una pareja pierde sus dotes de seducción –me inclino a pensar que por la dichosa confianza.

Cuántas veces hemos oído quejarse a las mujeres de sus parejas en cuanto a que la seducción se terminó en la segunda cita?

Por qué las primeras veces que intimas con una persona, todo son detalles, caricias, susurros al oído, besos en sitios prohibidos, miradas de lujuria… Qué pasa después? Como pasamos de desnudar despacio y cuidadosamente a nuestro chico/a, como si desenvolviéramos un magnífico regalo,… a “te quitas el pijama” y ya está todo hecho.

Cómo explicar que una mujer, por el sólo hecho de acostarse todas las noches con su pareja, no se pone a mil. Que aunque tengamos otro cuerpo acostado al lado y veamos su erección no nos deshacemos en deseo carnal. Que necesitamos todo eso que nos distéis e hicisteis en esa primera vez, todas las veces.

La simpleza masculina siempre la he envidiado. Ojalá para nosotras fuera tan fácil estimularnos.

Si bien, también me da lástima oír incesantemente como mis amigos masculinos reclaman más sexo de sus parejas. Cuando en temas de amor, de algo te quejas sospecha que es culpa tuya. Sólo es un decir, pero quizá tu chica no está a tono porque tú no haces lo que hacías antes para ponerla a tono.

Conozco parejas en la que el hombre dormita en el sofá de 9 a 11 de la noche mientras su chica se dedica a sus labores, -dicese ver cualquier cosa en la televisión- y cuando se despierta pretende irse a la cama y hacerle el amor. Sin más. Ese es todo el preliminar. Me he despertado excitado y pienso que a ella también le apetece. Y quizá le apetezca pero, ella, necesitará un poco de seducción para que su mente permita que su cuerpo se relaje y se estimule. No hablo de esos preliminares que todos conocéis, y que consiste en localizar ese punto Genial, y cuatro caricias más. Vamos a ver! El cuerpo de una mujer empieza en su cabeza. La ventana más accesible a su cerebro es el oído, de ahí que la voz sea tan importante. Háblale, susúrrale, pídeselo y luego desnúdala y contempla su desnudez como si fuera la primera que vez que la posees.

Si la naturaleza fuera tan sabia como se dice que es, seríamos nosotras las que estaríamos todo el tiempo excitadas y no pensaríamos otra cosa que en el sexo, para ahorrar tanto esfuerzo a nuestras parejas. Pero hasta el día de hoy, no es así.


No es que pidamos tanto… es que queremos más.


8 comentarios:

HombreRevenido dijo...

Sabias palabras.

A veces se nos olvida a todos que seducir no es conseguir. Seducir es merecer.

la maru dijo...

Deberíamos ser adictos a la conquista y esforzarnos todos los días, por conquistar, seducir, y "merecer" al otro. (Al menos, estaría bien, un día sí y otro no.)

Dina dijo...

Nena, ¿porque no escribes un libro sobre el tema y lo publicas?... yo intento conseguirte las ayudas (económicas) necesarias para su publicación... ¿?¿?¿? aunque no sé si entra de los objetivos que se financian en mi chalecito, pero lo intentaremos.

la maru dijo...

Dina, alguien debería de escribirlo, yo no, desde luego. Aunque debería ser suficiente con hablarlo, gritarlo desde los balcones, hacer una campaña publicitaria agresiva sobre este tema...
vale, igual me he pasado...jajaja

Dina dijo...

Maru, lo digo porque otras con menos lo han escrito... y me da en la nariz que los ingresos son bastante suculentos.

Ahora en serio, creo que ellos fallan... que se olvidan de todos los preliminares y van a buscar, directamente, el botón de "ON" pero hemos de reconocer que nosotras también modificamos conductas... así que debe ser una culpa compartida... amos, eso creo... que quizás este confundida... o quizás no... o quemeseyo, que hoy es viernes y no me apetece pensar, jaja

Anónimo dijo...

"De que sexo sean en realidad me da igual, es lo que menos me importa.Me puede gustar un hombre o una mujer. El placer no esta en follar. A mi no me atrae un buen culo, un par de tetas o una polla asi de gorda. Bueno, no es que no me atraigan, calro que me atraen, me encantan, pero no me seducen.Me seducen las mentes, la inteligencia,me seduce una cara y un cuerpo cuando veo que hay una mente que los mueve que merece la pena conocer. Conocer, poseer, dominar,admirar. La mente, hay que follarse a las mentes.."
Quien averigue de que pelicula es, cena por todo lo alto ¡¡
¿ Esto es más o menos??

Anónimo dijo...

no dejas de sorprenderme,gratamente sea dicho de paso, jejejeje

la maru dijo...

Sigo pensando en la peli, Anónimo. Ya veo que no soy la única que piensa que la sensualidad y la sexualidad deberían ir siempre de la mano, y en ese orden.